El Gobierno nacional oficializó el protocolo que regirá el
accionar de las Fuerzas Armadas para detener civiles en situación de flagrancia
en la frontera norte, en el marco de los operativos destinados a combatir el
crimen organizado. La medida, impulsada por el Ministerio de Defensa a cargo de
Luis Petri, busca operativizar el artículo 34 del Código Procesal Penal dentro
de las fuerzas, estableciendo un esquema regulado que enfatiza el respeto por
el uso proporcional de la fuerza.
Las fuerzas recibieron directivas estrictas para su
aplicación ante la detección de un delito en flagrancia. El protocolo establece
que, en primer lugar, el personal militar deberá identificarse claramente como
miembro de las Fuerzas Armadas y agotar todas las instancias para detener la
situación mediante métodos no violentos. En caso de ser necesario el uso de la
fuerza, se deberá emitir una advertencia verbal previa. La utilización de la
fuerza solo se autorizará cuando sea estrictamente imprescindible, y si las
condiciones lo permiten, se priorizará la convocatoria a personal de fuerzas de
seguridad o policiales, quienes cuentan con formación específica para la
gestión escalonada de conflictos.
El protocolo también subraya que cualquier accionar deberá
ser proporcional a la gravedad de la amenaza, buscando minimizar daños y
lesiones. Se prohíbe expresamente disparar contra vehículos o personas
sospechosas que intenten huir de controles o instalaciones militares, incluso
ante indicios de un posible ilícito. El uso de armas letales se restringe a
situaciones de legítima defensa propia o de terceros ante agresiones que pongan
en riesgo la vida o la integridad física, y de ser posible, se deberá realizar
un disparo de advertencia previo. En caso de disparar, se deberá intentar
impactar en zonas no vitales para evitar consecuencias fatales o daños
colaterales innecesarios. El protocolo faculta a las Fuerzas Armadas a realizar
aprehensiones transitorias de personas sorprendidas en flagrancia, con la
obligación de informar inmediatamente a las fuerzas de seguridad o al
Ministerio Público Fiscal para que asuman la intervención correspondiente. Este
protocolo se aplicará en el marco del operativo "Julio Argentino
Roca", desplegado en zonas rurales del norte y noreste del país, alejadas
de centros urbanos y pasos fronterizos oficiales.
P.D.J.S.