El jefe de la Policía del Chaco, Fernando Javier Romero, se
encuentra en el centro de la polémica tras confirmar que su remuneración
mensual supera los 10 millones de pesos. La cifra, que trascendía en rumores,
fue validada por el propio funcionario durante una entrevista con el ex policía
y comunicador Gustavo Olivello, quien le preguntó directamente sobre la
magnitud de su salario. Ante la consulta de si su sueldo superaba los 10
millones, Romero respondió: “No me sobra, pero me alcanza”.
La confirmación de este ingreso generó de inmediato una ola
de críticas y cuestionamientos en la provincia, dada la significativa
disparidad con los salarios de otros funcionarios públicos de alto rango,
incluyendo jueces, legisladores provinciales e incluso el propio gobernador
Leandro Zdero. Asimismo, el sueldo del jefe policial equivale a más de 36 veces
el salario mínimo vigente en Argentina, en un contexto económico nacional donde
una parte considerable de la población lucha por cubrir sus necesidades básicas.
La revelación de este abultado salario ha encendido el
debate sobre la distribución de los fondos públicos en la provincia. Sectores
de la sociedad y referentes de diversas áreas manifestaron su malestar,
especialmente en un contexto donde el sistema de salud provincial enfrenta
serias dificultades operativas, las escuelas presentan graves carencias
edilicias y la inseguridad continúa siendo una de las principales
preocupaciones de los ciudadanos chaqueños. La polémica pone de manifiesto la
sensibilidad en torno a la equidad salarial y la priorización del gasto público
en la provincia del Chaco.
Por P.D.J.S.