Leonardo da Vinci (1452–1519), figura cumbre del Renacimiento, continúa asombrando al mundo con su multifacética genialidad, que se extendió desde la pintura icónica como la Mona Lisa y La Última Cena, hasta la anatomía, la ingeniería, la arquitectura y la óptica. A 573 años de su nacimiento, celebrado hoy 15 de abril, National Geographic explora tres curiosidades que revelan la fascinante vida y obra de este visionario.
1. Un Origen Humilde en la Cuna del Genio:
Nacido el 15 de abril de 1452 en el pintoresco pueblo toscano de Vinci, Leonardo llegó al mundo fuera del matrimonio, hijo de Ser Piero, un notario florentino, y Caterina, una campesina. A pesar de su origen ilegítimo, su padre lo reconoció y le brindó educación, abriéndole las puertas al floreciente Renacimiento italiano. Desde temprana edad, Leonardo demostró un talento excepcional para el dibujo y la música, habilidades que cultivó en su infancia. Su precocidad artística lo convirtió en un niño prodigio, capturando la atención de artistas y mecenas de Florencia, marcando el inicio de un camino que lo consagraría como una figura clave en la historia del arte y la ciencia, trascendiendo sus humildes comienzos.
2. El Deslumbrante Aprendizaje en el Taller de Verrocchio:
A los 12 años, Leonardo se trasladó a Florencia para iniciar su formación en el prestigioso taller de Andrea del Verrocchio, un renombrado pintor y escultor de la época. En este ambiente artístico, compartió aprendizaje con otros futuros maestros del Renacimiento como Sandro Botticelli y Pietro Perugino. Bajo la tutela de Verrocchio, Leonardo perfeccionó sus habilidades en dibujo, pintura y escultura, absorbiendo las técnicas de los grandes maestros. Su talento innovador pronto comenzó a destacar. La anécdota cuenta que al pintar un ángel en la obra de Verrocchio "El Bautismo de Cristo", la maestría de Leonardo fue tal que su mentor, impresionado por la perfección de su discípulo, decidió abandonar la pintura. Este episodio marcó el inicio de la carrera independiente de Leonardo, cuyo renombre perdura hasta nuestros días.
3. El Misterio de los Cuadernos Espejo:
Una de las características más intrigantes de Leonardo da
Vinci fue su meticulosa documentación de sus investigaciones en cientos de
cuadernos repletos de dibujos, notas, cálculos y observaciones sobre diversos
temas, desde la anatomía hasta el diseño de máquinas voladoras. Sin embargo,
gran parte de estos escritos se realizaron en escritura especular, es decir, de
derecha a izquierda. Varias teorías intentan explicar esta peculiaridad: desde
la protección de sus descubrimientos hasta una técnica para evitar manchas al
escribir siendo zurdo. También se especula que esta escritura invertida
dificultaba la copia de sus innovaciones científicas. Entre sus cuadernos más
célebres se encuentran el Códice Leicester, adquirido por Bill Gates, y otros
valiosos manuscritos dispersos en colecciones europeas. Estos cuadernos
contienen dibujos reveladores y diseños visionarios, siglos adelantados a su
tiempo, que continúan inspirando a científicos, ingenieros y artistas en la
actualidad.
Leonardo da Vinci, uniendo arte y ciencia de manera única,
trascendió las fronteras de su tiempo. Sus investigaciones científicas, a
menudo más avanzadas que las de sus contemporáneos, lo convirtieron en un
pionero. Su legado perdura en su arte y en sus contribuciones a la ingeniería y
la medicina, inspirando a generaciones con su curiosidad insaciable y su visión
interdisciplinaria. Nos legó la comprensión de que el arte y la ciencia no son
disciplinas separadas, sino complementarias, invitándonos a observar el mundo
con asombro y una búsqueda constante de conocimiento.
Por P.D.J.S.