Si bien desde el sector inmobiliario destacan la reactivación del mercado tras la derogación de la ley de alquileres, para los inquilinos lejos se está de un panorama positivo.

Es que el DNU 70/23 instrumentó cambios en la forma en que se pactan los contratos. La libertad que instaura entre las partes para negociar flexibilizó la normativa de un mercado que estaba en conflicto. A siete meses de su entrada en vigencia, los agentes inmobiliarios sostienen que la derogación de la ley de alquileres reavivó la oferta, pero para los inquilinos los efectos impactan en forma negativa, ya que los derechos no están equiparados.

"La situación no mejoró. La simple eliminación de una herramienta legal no iba a mejorar una situación que requiere de un análisis y de un trabajo mucho más pormenorizado. Eso era justamente lo que se inició con la ley de alquileres. Esa ley era un paso inicial de políticas públicas que permitan el acceso a la vivienda de la mayoría de la gente. La derogación de la ley de alquileres fue volver a foja cero", dijo a República de Corrientes el abogado especialista en alquileres y referente de la Asociación de Inquilinos de Corrientes, Adrián Sandoval.

"Nosotros ya lo habíamos anticipado. No había manera de que el mercado por sí solo, sin ningún tipo de control estatal permitiría un mejoramiento de la situación de los inquilinos. Para ellos, hay un gran estado de precariedad porque ahora no tienen ninguna herramienta legal con la cual defenderse. Con la vigencia del decreto no cambió nada para bien y mucho para mal", agregó.

De hecho, a partir de la desregulación de las condiciones de alquiler, la Encuesta Nacional Inquilina de junio de 2024 refleja fuertes aumentos en el valor del alquiler; con plazos reducidos, actualizaciones mensuales o trimestrales y mecanismos de ajuste que no contemplan los aumentos de salario.

"Más allá de los males que veníamos arrastrando,  los aumentos desmedidos no se han detenido sino que se han acelerado. Se prometía exactamente lo contrario, que con la derogación de la ley y el juego de libre mercado iban a bajar y eso no sucedió", dijo Sandoval.

"Tampoco ha aumentado significativamente la oferta. Quizás en algún comienzo de la entrada en vigencia del decreto puedo haber habido un aumento, pero no tardó en estancarse", consideró.

Mercado
Por el contrario, desde el sector inmobiliario aseguran que  se normalizó el mercado y hay que más  oferta, puesto que inmuebles destinados al alquiler temporario pasaron al tradicional.

"Desde la entrada en vigencia del DNU se dio libertad de acuerdo entre partes en lo que respecta a los plazos, la moneda y el tiempo para las actualizaciones. Se normalizó el mercado y muchos departamentos que en los últimos años se volcaron a los alquileres temporarios ahora volvieron a lo tradicional. Ahora, el interesado que esté buscando un departamento tiene opciones, lo que antes no pasaba. Eso también hace que los precios se vayan acomodando", dijo el presidente de la Cámara Inmobiliaria de Corrientes, Marcelo López Ortiz.

"Los contratos se vienen haciendo a uno o dos años, con actualizaciones de precios de cada tres o cuatro meses a partir del índice IPC o el IPL, que emite el Banco Central todos los meses", agregó en comunicación con la radio LT 7.

La situación actual es diferente de la de años anteriores. La actualización anual por el ICL, que antes dejaba los alquileres por debajo del valor de mercado, ahora resulta en incrementos que superan los valores de mercado, generando nuevos desafíos para inquilinos y propietarios. 

Los alquileres pactados bajo la ley derogada, en agosto tendrán un aumento del 247,5 %. Se trata de una cifra récord, ya que en julio el ajuste fue del 244,3 % y en junio 233 %. 

Con respecto al mercado inmobiliario,  explicó que "en los últimos dos meses, anduvo bien el sector en la compra-venta, sobre todo de unidades funcionales chicas, aquellas que el inversor busca para obtener una rentabilidad. Las propiedades que se venden hoy en día son las que están en precio, acorde al mercado o un poco más bajo".